Las varices son el resultado de la dilatación de las venas. Las causas de las varices pueden ser muy variadas y las complicaciones que pueden llegar a provocar también. Algunos ejemplos de estas complicaciones podrían ser enfermedades como la trombosis, las manchas en la piel, las úlceras o la flebitis.
Esclerosis venosa
Entre las causas de las varices se encuentran los factores genéticos, enfermedades, la calidad de vida, o situaciones especiales relacionadas con las hormonas (por ejemplo el embarazo). La esclerosis vascular (también conocida como escleroterapia) es uno de los tratamientos más comúnmente utilizados en el caso de pequeñas arañas vasculares. No importa donde estén localizadas las varices, este tratamiento es efectivo siempre y cuando el tamaño de las mismas sea pequeño.
Procedimiento de la esclerosis venosa
El método de la esclerosis vascular es sencillo. Consiste en la inflamación controlada de las paredes internas de la vena. Este sistema provoca la fibrosis y un proceso cicatricial que dan lugar a la eliminación de la variz. Los procedimientos para llevar a cabo este tratamiento de escleroterapia son diversos:
- Esclerosis Química: funciona mediante la inyección de líquido esclerosante. Este líquido tiene unas propiedades especiales que provoca la fibrosis y el proceso cecatricial mediante el que desaparece la variz. Cada médico puede elecir el líquido esclerosante que considere más conveniente de todos los que hay en el mercado.
- Crioesclerosis: también funciona mediante la inyección de esclerosantes líquidos, la diferencia radica en que se hace a temperaturas por debajo de los 30º. En este procedimiento la reacción inflamatoria es menor debido al frío y a consecuencia de esto, también se necesita una dosis de producto menor.
- Esclerosis con Espuma: en este caso se inyectan los esclerosantes no de forma líquida sino como espuma. Para conseguir este cambio en el estado de los esclerosantes se manipulan mediante reacciones químicas. Al tener forma de espuma, el esclerosante consigue un contacto mayor y por tanto un efecto mayor también. Últimamente ha aparecido un dispositivo que reúne las cualidades de realizar una abrasión intravenosa a la vez que se infunde microespuma para esclerosis (Clarivein), con gran efectividad clínica y cosmética
- Fotoesclerosis: utiliza la energía de la luz (como el láser) para provocar la coagulación.
- Electroesclerosis: la electroesclerosis utiliza corrientes eléctricas de intensidad baja y provoca la coagulación.
- Estas dos últimas técnicas son aplicables tan solo en varices de gran tamaño, como ya comenté en el capitulo de Insuficiencia Venosa Crónica
A día de hoy no puede asegurarse que ninguno de estos procedimientos sea mejor que otro. Todos tienen unos efectos similares y debe ser el médico el que decida qué método utilizar en cada caso, ya que depende del paciente y de la situación concreta en la que se encuentre.
Tratamiento con esclerosis venosa
Todos los tratamientos de esclerosis vascular utilizan esclerosantes, ya sea en forma líquida, de espuma o a diferentes temperaturas. Los esclerosantes pueden utilizarse también de manera pura, diluídos o mezclados con otros medicamentos y productos. El tratamiento de las venas varicosas se hace mediante pequeños pinchazos con agujas muy finas que se dispersan a los largo de la zona a tratar. En el caso de la electroesclerosis, las corrientes eléctricas utilizadas son siempre de baja intensidad y se transmiten directamente a las paredes de las venas a través de agujas que son a su vez electrodos. Estas agujas son utilizadas para inyectar también la solución química. Dependiendo de método que se haya elegido para realizar el tratamiento de la esclerosis vascular, deberán realizarse solo una o varias sesiones. Por lo general suele dejarse un margen de una semana como mínimo entre tratamientos aunque lo más seguro es esperar al menos dos. En caso de dudas, consulta siempre con tu médico especialista y te aconsejará de cuanto debes esperar en tu caso concreto. Una vez se ha llevado a cabo el tratamiento, sea cual sea el procedimiento, es común utilizar un vendaje de compresión que suele ser con vendas, fajas o cualquier otra prenda elástica. El tiempo de utilización de esta prenda es de 24 horas aunque algunas personas prefieren llevarlas hasta dos días después.
Duración de la esclerosis venosa
La escleroterapia o esclerosis vascular es un tratamiento de corta duración. Cada sesión puede durar entre los 15 y los 60 minutos dependiendo de la gravedad de la situación y la cantidad de varices.
Consejos sobre la esclerosis venosa
Los inconvenientes del tratamiento de la esclerosis vascular son pocos. Las molestias suelen ser escasas ya que las agujas utilizadas son muy pequeñas. Es muy probable sentir algo de escozor cuando se inyecta el líquido esclerosante o sentir las pequeñas descargas eléctricas en el caso de la electroesclerosis pero siempre son sensaciones pequeñas. Con la fotoesclerosis también se siente algo de calor. Se debe evitar siempre la exposición al sol en las zonas que se han tratado por lo que el invierno es una de las mejores épocas para la realización de este tratamiento. Si no se sigue este consejo el paciente se expone a que aparezcan manchas en la piel debido a los esclerosantes.

Contraindicaciones sobre la esclerosis venosa
Algunas de las contraindicaciones más comunes son las siguientes:
- Neuropatías y hepatopatías.
- Enfermedades agudas y crónicas del corazón.
- Arteriosclerosis con hipertensión.
- Alergia al esclerosante.
- Diátesis hemorrágica
- Estados de hipercoagulabilidad.
- Embarazo
- Trombosis venosa recidivante
- Edemas que no ceden con vendajes compresivos.
- Diabetes no tratada.
- Trombosis venosa profunda.
- Asma bronquial.
- Estados caquécticos y febriles.
- Labilidad Neurovegetativa.
Riesgos de la esclerosis venosa Siempre que nos sometemos a un procedimiento médico, ya sea quirúrgico o no, existe la posibilidad de que ocurra algo no esperado. Es decir, siempre hay un riesgo. Los riesgos de este tratamientos son muy escasos y prácticamente se concentran en la posibilidad de una mancha temporal en la zona esclerosada o, en raros casos, una infección. En todo caso, es una situación muy atípica y no suelen ocurrir.